El sacerdote Marian Rajchel, de la ciudad de Jaroslaw, sureste de Polonia, dice que un demonio lo ha estado amenazando y ofendiendo a una forma “inusual”: a través de mensajes de texto.
Él dice que sus problemas comenzaron después de un exorcismo fallido de una joven en su comunidad. El sacerdote reconoce que ella aún no ha sido liberada y que necesita ayuda.
Según las agencias de noticias europeas Rajchel ha sido vehemente en afirmar que “el autor de estos textos es un espíritu maligno que poseía el alma de la joven. A menudo, los propietarios de teléfonos móviles ni siquiera saben que están siendo utilizados de esta manera, pero en este caso no hay duda”.
Después de exorcizar a la joven siguiendo los ritos tradicionales de la Iglesia católica, Rajchel se fue a casa molesto por no haber tenido éxito. Unos días más tarde, empezó a recibir mensajes de texto “desagradables”.
Uno de los mensajes recibidos por el sacerdote dice: “Ella no va a salir de este infierno. Ella es mía. Cualquier persona que ore por ella va a morir”. Rajchel le envió una respuesta por SMS, diciéndole que aún continúa rezando por el alma de la joven. Luego vino la réplica: “Cállate, predicador. Ni siquiera te puedes salvar a ti mismo. Idiota. Eres un cura viejo y patético”.
Para el sacerdote, está claro que los demonios se adaptan a las tecnologías y usan a los seres humanos para enviar mensajes.
El padre Rajchel se ha tomado este asunto muy en serio y no cree que se trate de ningún tipo de broma.
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