Tulum en Quintana Roo es un destino turístico que te ofrece estar en contacto pleno con la naturaleza pero nadie nunca habla de los riesgos que esto implica. Picaduras de mosquitos, insolación, quemaduras de primer grado debido a la exposición al sol, son algunas de las consecuencias de exponerse a la naturaleza si tu vida diaria transcurre entre cuatro paredes de una ciudad infame.
Sin embargo, un arriesgado turista nunca imagino que además de esos “peligros” también corría el riesgo de convertirse en comida para cocodrilo. Y de uno muy grande.
Este chico vivió verdaderos momentos de angustia cuando nadaba cerca del puente de Boca Paila, en la Reserva Ecológica de Sian Ka’an, al hacer un esfuerzo mayor para resguardarse de un cocodrilo de más de tres metros.
Cuentan quienes ahí viven que se trata de un macho de cocodrilo acutus de más de tres metros que suele ser alimentado por los pescadores. “Es experto en robar el pescado a los pescadores inexpertos que no recogen rápido”, cuenta un vecino del cocodrilo.
“Por desgracia ese cocodrilo ya nos asoció con comida y como lo demuestra el video, el muchacho se salvó porque el cocodrilo está bien alimentado y lo persiguió a un ritmo que le permitió llegar a la orilla”.
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