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¿Pueden las fantasías y los celos ser patológicos?

¿Tienes fantasías sexuales? Son muchas las personas que han afirmado tener fantasías sexuales. Un grupo de científicos están analizando qué tipo de pensamientos son esos, al igual que los celos, de los que ambos sospechan que podrían ser patológicos.

Una investigación de Christian Joyal reconoce en relación a las fantasías sexuales de los seres humanos que "uno de los hallazgos más interesantes tiene que ver con el importante número de varones que fantasea". Sostiene algunos ejemplos al respecto: " por ejemplo, con transexuales, sexo anal entre heterosexuales y la idea de ver a su pareja tener relaciones sexuales con otro hombre".

Pero no solo eso, ya que los expertos también advierten que los celos también pueden ser patológicos.

Argumentan que los celos parecen formar parte de la relación amorosa como una manifestación del miedo a perder a la persona amada.

Christian Joyal, autor de una investigación que se publica en «The Journal of Sexual Medicine», habla sobre las fantasías sexuales. "Clínicamente sabemos que las fantasías sexuales patológicas son aquellas que involucran a parejas sin su consentimiento".

Y agrega al respecto: "inducen dolor a otras personas o que son absolutamente necesarias para obtener satisfacción, pero aparte de eso, ¿qué son exactamente las fantasías anormales o atípicas?".

¿Será verdad? Al parecer, ¿Pueden ser nuestras fantasías sexuales patológicas? Varios investigadores de Instituto Universitario de Montreal y el Instituto Philippe Pinel han llevado a cabo una investigación sobre las fantasías sexuales. 

La literatura científica no ha descrito, hasta el momento, este tipo de pensamientos del ser humano. El trabajo, que se publica en la revista Journal of Sexual Medicine, describe qué es una fantasía inusual y los tipos de pensamientos que desarrolla la mente humana en este ámbito.

Casi con seguridad, en algún momento de su vida, haya generado algún tipo de pensamiento sexual o erótico. Puede que esta reacción del cerebro le haya parecido normal, gratificante o, tan solo, no se haya parado a valorarla. 

O puede que le haya despertado la duda de cómo de normal es tener las llamadas fantasías sexuales. La comunidad científica, que no se priva de dejar preguntas sin resolver, ha realizado una investigación sobre cómo de frecuentes son esos pensamientos y en qué medida se pueden considerar normales. 

Para realizar el trabajo, los expertos han contado con la participación de estudiantes universitarios; 799 hombres y 718 mujeres, con una media de edad 30 años, que respondieron un cuestionario y describieron su fantasía sexual favorita.

El autor principal del estudio, Christian Joyal, cuenta cómo surgió el estudio. “¿Qué son exactamente las fantasías anormales o atípicas? Nos preguntamos un día. Para averiguarlo, nos preguntamos personas en la población general, tan simple como eso”, explica Joyal. 

“Nuestro principal objetivo era especificar las normas en las fantasías sexuales, un paso esencial en la definición de patologías”, explica el científico según la plataforma Eurek Alert. “Y como sospechábamos, hay muchas fantasías más comunes que las fantasías atípicas. Por lo tanto hay una cierta cantidad de juicio de valor en el El Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales de la Asociación Estadounidense de Psiquiatría (DSM-5)”, dice Joyal.

Las conclusiones explican que “la naturaleza de las fantasías sexuales varió entre la población general, pocas fantasías pueden considerarse estadísticamente raras, inusuales o típicas”, dice la investigación. Sin embargo, “no es sorprendente que el estudio confirma que los hombres tienen más fantasías y los describen con mayor intensidad que las mujeres”, según puede extraerse del estuio. 

“Es importante destacar que, a diferencia de los hombres, las mujeres en general distinguen claramente entre la fantasía y el deseo. Por lo tanto, muchas mujeres que expresan fantasías más extremas de presentación, por ejemplo, la dominación por un desconocido, especifican que nunca quieren estas fantasías se hagan realidad”, describen los científicos en la publicación. 

En general, “los hombres en parejas fantasean mucho más acerca de las relaciones extramaritales en comparación con las mujeres”, es la última de las conclusiones.

El estudio ha catalogado en tres los tipos de fantasías descritas por los participantes en el estudio. Fantasías raras, por ejemplo, tener relaciones sexuales con un niño o un animal; fantasías inusuales, como el travestismo, sexo con una prostituta, o tener sexo con una persona intoxicada. 

Dentro de las fantasías típicas se describen pensamientos como tener sexo en un lugar romántico, sobre todo las mujeres; recibir sexo oral o, la preferida de los hombres, sexo con dos mujeres.

Dado que la mayoría de los estudios sobre las fantasías sexuales se llevan a cabo con estudiantes universitarios, un paso más en la investigación sería la búsqueda de una muestra de adultos dispuestos a describir sus fantasías sexuales. ¿Se apuntan?



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