El contacto con seres del más allá es una experiencia que no todos están dispuestos a tomar como algo real. Sin embargo, contundentes evidencias sobre estos sucesos suelen darse a conocer cada cierto tiempo y logran incomodar hasta a los más escépticos.
Así es el caso de Nichols McCabe, un niño estadounidense que apareció en una foto familiar tomada dos meses después de su muerte.
Durante el 4 de julio del año pasado, el papá del pequeño fallecido tomó una foto en el jardín de su casa. La cámara apuntaba a la pequeña prima del niño. Pero la escena capturada por la lente mostró algo que los ojos del hombre no fueron capaces de observar en aquel momento.
Tras revelar la imagen, se pudo ver claramente la cara del Nichols, quien se encontraba detrás de la pequeña.
La sorpresa, el temor y cierto halo de esperanza se desataron a raíz del descubrimiento. Dos meses antes de la fotografía, el niño había perdido la vida de una manera espeluznante.
Un tornado de categoría F5 azotó ferozmente la ciudad del la familia McCabe, Moore, en Oklahoma. Los vientos soplaban a 210 kilómetros por hora. El fenómeno natural se llevó las almas de 23 personas y dejó a unos 377 damnificados.
Durante el momento de mayor intensidad del tornado, el pequeño Nichols se encontraba en la Escuela Primaria Plaza Towers. La fuerza del viento hizo volar el techo del establecimiento educativo.
Durante el incidente, las tuberías colapsaron y seis niños murieron ahogados. Entre ellos, el menor que reapareció dos meses después en la fotografía de su padre.
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